Cascadas más bonitas de España: planes para realizar excursiones

Cascadas más bonitas de España:

Con relación a las cascadas más bonitas de España, no es necesario ser un senderista experto para ir a visitarlas.

Un viaje a través de 17 cascadas, disfrutando del verde, el aire puro y la belleza natural, te llevará por todas las comunidades autónomas.

Algunas de las cascadas más bonitas de España

Andalucía: cascadas del río Borosa, Santo Tomé (Jaén)

Nace en la piscifactoría del río Borosa y asciende por este afluente del Guadalquivir, serpenteando por el Desfiladero de Elas o Cerrado, el vertiginoso Salto de Arganos y la Laguna de Valdeazores. En el camino, pasarás por cascadas, lagunas, estanques color esmeralda, etc.

Cataluña: Salt de Sallent, Rupit (Barcelona)

Hay más en este pintoresco distrito de construcción de piedra y de la era medieval que solo el hecho de que se puede llegar a él por un puente peatonal colgante.

Además, es el punto de partida de una pequeña caminata que te lleva en menos de una hora al Salt de Sallent, la cascada más alta de Cataluña con unos 115 metros.

Una caminata de 20 minutos desde un estacionamiento cercano lo llevará a un mirador que está al lado de la cascada.

Aragón: cascada del Forau de Aiguallut, Benasque (Huesca)

El foro del tamaño de un estadio, que se encuentra a dos horas y media a pie de Llanos del Hospital, es donde las aguas recién formadas del hielo montano se deslizan bajo tierra siguiendo una estruendosa cascada.

Lo más curioso de esta cascada es que no devuelve el agua al valle de Benasque sino, que la envía bajo tierra al cercano valle de Arán, que se encuentra en la vertiente atlántica y es el único valle del Pirineo aragonés que no desemboca en el Mediterráneo a través del Ebro.

Asturias: cascada de la Seimeira, Santa Eulalia de Oscos

La cascada más grande de la zona es la Cascada de Seimeira, formada por el río Murias, cae en cascada por un acantilado rocoso de 20 metros de altura. En el cercano concejo de Taramundi, el agua también juega un papel destacado. Uno de los seis mazos, enormes martillos propulsados ​​por la fuerza de un río cercano, todavía puede verse en uso en el conjunto etnográfico de Os Teixois. Además, el arroyo se usa en la taberna para enfriar la sidra.

Canarias: cascada de Los Tilos, San Andrés y Sauces (La Palma)

La cascada está situada en el municipio de San Andrés y Sauces, a poca distancia del centro de visitantes Los Tilos. Llegarás allí en menos de diez minutos avanzando por un camino que pasa por varios túneles bien iluminados. Estará rodeado de mucha vegetación, incluyendo helechos gigantes, palo blanco, laureles, barbusanos, viátigo, fayas y brezos. Y de total tranquilidad, además de que los visitantes de La Palma son en general respetuosos y tranquilos.

Castilla y León: cascada de Orbaneja del Castillo y el nacimiento del Nervión, Burgos

Un torrente que nace de la Cueva del Agua, justo encima de las viviendas de Orbaneja del Castillo, crea esta cascada. Un torrente que, nada más ver la luz, atraviesa el pueblo a toda velocidad, salta 25 metros al Ebro y se rompe en miles de pedazos sobre la roca tobácea cubierta de musgo. Más sorprendente aún, todo esto ocurre en un recodo del Cañón del Ebro, un foso de 200 metros de profundidad que el gran río ibérico labró en los páramos calizos del norte de Burgos.

Fuente principal: EL PAÍS

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