El título Patrimonio de la Humanidad fue concedido por primera vez en 1972 por la Unesco. El objetivo de este titulo es catalogar, preservar y dar a conocer sitios de importancia cultural o natural para la humanidad.
En los últimos daños, la UNESCO ha ido apostando por tipologías de bienes muy distintas a los valores clásicos y es que han entrado a la lista muchos yacimientos arqueológicos, regiones vitivinícolas o áreas industriales que tras el cierre de los hornos, se han convertido en espacios culturales y arquitectónicos relevantes.
Existe un listado de requisitos para los bienes culturales para poder aspirar a formar parte de dicha mención. Como mínimo se debe cumplir uno de los siguientes requisitos:
- Debe ser una representación de la creatividad del ser humano
- Debe dar fe del intercambio de valores y conocimientos humanos a lo largo de un periodo de tiempo o dentro de una región cultural del mundo.
- Debe aportar un testimonio único o excepcional de una tradición cultural o de una civilización existente o ya desaparecida.
- Debe ser un edifico o paisaje que ejemplifique una etapa significativa de la historia humana.
- Debe ejercer de ejemplo relevante de alguna tradición de asentamiento humana y que sea representativa de una o varias culturas.
- Debe estar asociado con tradiciones o acontentecimientos vivos, ideas, creencias, o trabajos artísticos o literarios de destacado reconocimiento universal. En este punto, un comité especializado también valorará que se cumpla algún otro requisito de manera complementaria.
En lo que respecta a los bienes naturales, las exigencias son:
- Debe albergar fenómenos naturales muy relevantes o áreas de excepcional belleza natural.
- Debe pertenecer a alguna etapa de la historia de la tierra, ya sean procesos geológicos o testimonios de vida.
- Debe dar ejemplo de algún proceso, ya sea biológico o ecológico, de la evolución de los ecosistemas.
- Debe acoger los hábitats naturales más importantes y representativos para la conservación de la biodiversidad, incluyendo los que contienen especies amenazadas.
Finalmente, formar parte de este listado también tiene sus obligaciones. La principal obligación es velar y preservar el monumento/ paisaje, promoviendo leyes que lo protejan de cualquier amenaza posible e informando a la UNESCO de cualquier acción que pueda dañar su valor. Entre los beneficios de formar parte del listado destaca el reconocimiento internacional, la ayuda en caso de cualquier riesgo e incluso la ayuda económica para cualquier acción de preservación o restauración.
Fuente: National Geograpahic