Cada verano son más las personas que se atreven con el turismo nacional y es por ello que describimos algunas de las que se consideran las mejores playas y calas de España.
En Ibiza se encuentra una de las calas favoritas por sus visitantes, la de San Vicente, aunque le sobre algo de urbanización, a principios o a finales de temporada se encuentra medianamente tranquila. Ni su arena ni su agua fallan.
En Mallorca está la playa virgen más larga de la isla mayor con más de 3 kilómetros de longitud, con finísima arena blanca y una extensión de aguas turquesas. La playa de es Trenc.
Las joyas de las baleares se encuentran en Menorca y son la cala Macarella y su hermana pequeña Macarelleta, al otro lado de la roca, según todo guía, turista y una gran mayoría de nativos.
Para pasar de una, está la opción de nadar, caminar por los acantilados o seguir, por fuera, un tramo del famoso Camí de Cavalls menorquín, sendero histórico que da la vuelta a la isla.
En Formentera, Ses illetes esta una de las playas más peculiares por su formación. Sus aguas son cristalinas y calmadas, en contraposición a la orilla que suele ser bastante recurrida por los turistas.
La playa de San Antonio, situada en Llanes, Asturias tiene menos de 70 metros de longitud y solo se puede llegar a ella andando. Es una playa salvaje y natural entre rocosos acantilados que contrastan con sus tranquilas aguas.
Formada por arena blanca, agua cristalina y aislada por un sendero de casi un kilómetro, la playa de los muertos es lo más parecido al Caribe que hallarás por el sur. La diferencia es que nunca esta tan llena como las del Caribe.
Elegida por muchos como la mejor de la Costa Brava, Cala Futadera es un rincón natural virgen hacia el que se desciende por un escarpado bosque de pinos.
El verde y el turquesa son protagonistas en esta pequeña y tranquila playa catalana.
En Maspalomas, Gran Canaria hay un ecosistema dunar único e impresionante, dónde hay espacio para todos des de surfistas hasta nudistas.
Fuente: National Geographic