¿Quién no quiere escaparse un fin de semana o aprovechar para salir de casa en algún puente? Siempre es buen momento para hacer un viaje exprés y en Bujaldon te indicamos a dónde.
Da gusto disponer de un par de días para desconectar. Si eres amante de los viajes también puedes disfrutar de un sitio diferente por un periodo corto de tiempo. Por que cerca de casa, también hay miles de lugares por descubrir.
Dublín en Irlanda
Si te encanta rodearte de naturaleza, Dublín será tu viaje perfecto. Disfrutar de conciertos en el Temple Bar tomando una cervecita o degustando un whisky artesanal. Pasearte por los jardines del parque St Stephen’s Green, una zona urbana al lado de Grafton Street, que es la calle comercial más conocida del lugar por su grandes marcas.
También se puede ir al parque de Merrion Square, menos conocido, pero no por ello menos bonito y comer en un banco el famoso Fish&Chips. Para los fanáticos de Harry Potter, hay una increíble biblioteca construida en 1592 llamada Trinity College. Allí podrás sentirte como si estuvieses entre los pasillos del famoso Hogwarts.
Nápoles en Italia
Una escapadita al país de la pizza y los spaggettis, no podría faltar. Al sur de Italia se encuentra la ciudad de Nápoles. Cerca también del Monte Vesubio, donde se encuentra todavía activo el volcán que un día destruyo la ciudad romana de Pompeya. Allí podrás ver y visitar montones de lugares.
Como por ejemplo ir a visitar el Palacio Real. Los Napolitanos dicen que si consigues andar, con los ojos vendados, desde el Palacio Real hasta las estatuas de los dos caballos tendrás buena suerte. Si buscas la Nápoles verdadera, auténtica y real, no puedes perderte la “Spaccanapoli”. Una zona que divide la ciudad antigua entre norte y sur que merece la pena su visita por sus escenas de la vida cotidiana de Nápoles. Pero no podríamos irnos de Nápoles sin probar la mejor pizza del mundo, que sin duda, será un verdadero reto encontrar alguna que no esté buena.
Tirana en Albania
El único destino virgen de Europa hasta el momento por sus playas medio salvajes. Dejarse llevar por el barrio de Blloku, donde están los mejores restaurantes y pubs de la ciudad. Degustar cafés, Korça o Tirana la cerveza local, y para los más atrevidos. probar el raki, una bebida alcohólica nacional muy fuerte.
Las amplias calles con mansiones y verdes jardines no tendrían envidia de la 5ª Avenida de Nueva York. En cambio, el resto de la ciudad aun conserva ese toque soviético hasta el el punto de tener uno de los museos más importantes en un búnker nuclear. Para visitar esta ciudad sobre todo déjate sorprender por su historia, arte y arquitectura.
Brístol en Reino Unido
Al sudoeste de Inglaterra y extendiéndose a lo largo del río Avon se encuentra la ciudad marinera de Brístol. Uno de los cuarenta y siete condados de Inglaterra, en el Reino Unido. Sin lugar a dudas, Stokes Croft es la zona más artística y alternativa de la localidad. Pasear por esa zona podrás observar miles de grafitis de diferentes dimensiones que decoran todos los edificios, vallas y comercios. Olvídate de desayunos en Starbucks, en Bristol se tiene que ir a las cafeterías de toda la vida, las de verdad . Si valoras el espíritu indie y creativo, tanto su vida cultural como su gastronomía Brístol sería tu viaje perfecto.
Oporto en Portugal
La hermosa ciudad vecina Oporto, su gente trabajadora y su vino… su buen vino con vistas al mar! También es conocida por sus importantes puentes y producción de la ciudad. Allí, si o si, hay que visitar las calles estrechas de adoquines que están bordeadas de casas de mercaderes y cafés.
Además de visitar La Avenida dos Aliados y el Ayuntamiento de Oporto, la estación de San Bento o la Torre de los Clérigos que son impresionantes.
Róterdam en Países Bajos
La ciudad que nombran como la más creativa y moderna de Europa es Róterdam, por tener el puerto más activo del continente y por sus miles de edificios diseñados por los arquitectos más importantes del mundo.
En la ciudad está el nuevo alojamiento flotante «Floating Rotterdam», cerca del parque flotante reciclado, el The Depot, un almacén de arte o Brutus, un barrio para acoger artistas de todo el mundo. Todos los experimentos posibles en el mundo contra el cambio climático se centran en esta ciudad.
Copenhague en Dinamarca
Como no visitar la capital de Dinamarca, si hasta tiene sede del Museo de la felicidad. Ubicada en las islas litorales de Selandia y Amager. Conectado con Suecia a través del puente de Öresund. Es la ciudad líder de la tecnología limpia en el mundo, se respira verde por todas partes.
Lugar ideal para visitar con niños, a pie o en bicicleta, ya que cuenta con 350 km de carriles-bici. Se puede explorar el Palacio de Frederiksborg y su escenario de Hamlet, el Palacio de Kronborg o el Museo de Arte Contemporáneo de Louisiana. Disfruta del ahora, pero vive en el mañana.
Hamburgo en Alemania
Hamburgo es una importante ciudad portuaria en el norte de Alemania conectada con el río Elba. En ella cruzan cientos de canales y amplias áreas verdes, por ello la llaman la Venecia del Alemania. El Lago Alster interior tiene numerosos botes y está rodeado de cafés.
Se caracteriza por ser una de las ciudades más urbanizadas de Europa y la segunda más grande de Alemania. En pocos días puedes visitar la plaza del Rathaus (Ayuntamiento), la iglesia de San Nicolás o la zona del Reeperbahn y St. Pauli.
Sin duda, un viaje con mucho, mucho que ver.
Amberes en Bélgica
Es un destino perfecto para una escapada de pocos días ya que se encuentra a un par de horas en avión desde España. Aunque si hay buena conexión con Bruselas en tren sería la mejor manera para llegar a Amberes, por la calidad y el precio.
Tiene el museo Plantin-Moretus que es considerado el mejor del mundo en el campo de la impresión, con imprentas de 500 años de antigüedad. Imprescindible ir a Grote Markt, la plaza más bonita del planeta. Donde tomarse unas increíbles patatas fritas acompañada de una buena cerveza nacional en este viaje.
Touloose en Francia
En nuestro país vecino, se encuentra la capital de la región de Occitania del sur de Francia, Toulouse. A tan solo una hora de avión desde Madrid o cuatro en coche desde Barcelona. Es una ciudad que puedes disfrutar de muchas cosas, como por ejemplo, un paseo en barco por el Canal du Midi, una vía fluvial navegable que conecta la ciudad con el Mediterráneo, que es declarada Patrimonio de la Unesco.
En el centro de la «Ciudad Rosa» encontraremos un montón de bares acreditados por sus diez chefs con Estrellas Michelin, su Nº 5 Wine Bar tan premiado o sus 35 mercados. Además de comercios locales como la chocolatería La Compagnie du Chocolat.
La Place du Capitole, la Basílica de San Sernín o la Catedral de Toulouse son unas de los muchos lugares que no te puedes perder de visitar una vez estando allí de viaje.
Con estos destinos, ya no tienes escusa para viajar un fin de semana. Atrévete!
La fuente: Traveler