La utilización de marketing sensorial puede ser una forma muy eficiente de construir identidad de marca a la par que se incita al cliente a consumir un determinado producto o, simplemente, hacer que se encuentre lo más a gusto posible.
Dentro de la mercadotecnia sensorial, el marketing olfativo destaca por referirse a un sentido con gran capacidad para generar memoria emocional.
Así, si un hotel ha implementado correctamente esta técnica, probablemente el cliente recuerde el agradable olor de su habitación e instalaciones cuando recuerde memorias sobre su estancia, haciéndole propenso a guardar una opinión positiva sobre el hotel o, incluso, a hacerle querer repetir.
En el caso de las agencias de viajes, una esencia sugerente puede transportar al cliente antes de comprar el billete a una playa o paraje natural, empezando desde el minuto uno a mostrarle lo agradable que puede ser hacer ese viaje que tanto desea.
En España no faltan casos prácticos ni empresas dedicadas a este tipo de publicidad.
El pasado mes de mayo, Turismo de la Comunidad Valenciana desplegó en Madrid una campaña llamada ‘Quien lo ha vivido lo sabe’, consistente en varios carteles con difusor de olores, que transportaban al turista a “la terreta” mediante el olor a mar, a sus típicos naranjos o a una paella valenciana de leña.
En este caso, la campaña publicitaria corrió a cargo de Zenithbr, agencia de medios valenciana.
La mencionada The Aroma Trace, da varias pistas en su web de qué tipo de olores puede ser interesante potenciar en un alojamiento.
¿A qué huele un hotel?
Desde el punto de vista promocional, se utiliza el aroma a Gin Tonic para incentivar largas sobremesas con bebidas, a trufa para aumentar el ticket medio en restauración, a zumo recién exprimido para una valoración positiva del buffet de desayuno, a pan recién horneado, a jamón, a pizza en las hamacas, etc, explican desde la marca.
Así como también se está incorporando el uso de aromas para promover por ejemplo fiestas en la piscina, a través de su aroma característico o aroma a spa para incrementar la venta cruzada, entre otros, señalan.
Quedan así de relieve los diversos usos que puede tener una ambientación de este tipo en varias partes de la industria del turismo, desde la primera aproximación al viaje, hasta el destino final pasando por el traslado.
La fuente: Agenttravel