Los «nudgeables» son acciones sencillas que nos ayudan a elegir de manera más saludable o beneficiosa. Este concepto, introducido por Richard Thaler y Cass Sunstein, se basa en dar pequeños empujones en lugar de imponer reglas estrictas.
Un «nudge» es una forma de influir en nuestras decisiones sin forzarnos. Por ejemplo, si un menú muestra las calorías de los platos, es más probable que elijamos opciones más saludables.
Existen varios ejemplos de «nudgeables». Colocar frutas en lugares destacados de una tienda puede aumentar su consumo. También podemos usar recordatorios en el teléfono para que nos animen a beber agua o hacer ejercicio. Además, inscribir automáticamente a las personas en programas de ahorro facilita su participación.
Los «nudgeables» ofrecen beneficios significativos. Fomentan hábitos más saludables, lo que puede mejorar nuestra salud general. También ayudan a gestionar mejor el dinero, promoviendo el ahorro. Asimismo, incentivan comportamientos sostenibles, como el reciclaje o el uso del transporte público.
En resumen, los «nudgeables» son una manera efectiva de guiarnos hacia mejores decisiones sin ejercer presión. Con pequeños cambios en nuestro entorno, podemos lograr un gran impacto en nuestra vida diaria. Con pequeños empujones, podemos construir un futuro mejor.
Fuente principal: marketingdirecto