En pleno Camino de Santiago, específicamente en Ayegui, Navarra, se encuentra una de las paradas más singulares y queridas por los peregrinos: la Fuente del Vino de Bodegas Irache. Este surtidor, que ofrece vino tinto joven de manera gratuita, se ha convertido en un verdadero oasis para los caminantes que recorren el Camino Francés.
La tradición de ofrecer vino a los peregrinos se remonta a siglos atrás, cuando los monjes del Monasterio de Irache recibían a los viajeros con un vaso de vino como reconstituyente. Para mantener viva esta tradición, Bodegas Irache instaló la fuente a finales de los años 90. Cada día, la fuente se llena con aproximadamente cien litros de vino, permitiendo a los peregrinos calmar su sed y continuar su camino con renovadas energías.
La fuente dispone de dos caños: uno de agua y otro de vino, y está abierta todos los días del año hasta las 20:00 horas. En ella se puede leer la inscripción: «Si quieres llegar a Santiago con fuerza y vitalidad, de este gran vino echa un trago y brinda por la felicidad». Además, cuenta con una cámara que permite ver en tiempo real a los peregrinos que se acercan a visitarla.
Llegar a la Fuente del Vino es sencillo. Aunque lo ideal es hacerlo mientras se realiza el Camino de Santiago, también es posible acercarse directamente a las Bodegas Irache. Esta parada no solo ofrece un respiro y un trago de vino, sino que también rinde homenaje a la hospitalidad y generosidad que han caracterizado a los habitantes de la región a lo largo de los siglos.
En resumen, la Fuente del Vino de Bodegas Irache es una experiencia única que combina historia, tradición y la calidez del Camino de Santiago. Un alto en el camino que ningún peregrino debería perderse.
Fuente principal: msn