Las redes sociales son estructuras sociales compuestas por un conjunto de usuarios con más de una relación definida entre ellos.
Des de hace unos años se han convertido en una parte fundamental de la estrategia del marketing de muchas empresas.
Es importante escoger la red social que más se adapte al negocio ya que cada una tiene su público objetivo.
Una vez escogido el tipo de red social, hay que estudiar a la competencia antes de publicar algo. No se trata de imitarla, sino ver que patrón siguen y en que se diferencian unas de las otras.
Cuando se crea el perfil del negocio en las Redes, hay que tener en cuenta que debe resultar atractivo y cuidadoso. Debe quedar claro de que es el negocio y que se puede aportar al usuario que visite el perfil.
El mejor consejo que se puede seguir es invertir en contenido de valor. Cuando alguien visita las redes sociales lo hace con ganas de ver experiencias, imágenes de calidad, consejos, motivación… Por ello hay que hacer hincapié en tener publicaciones atrayentes.
Publicar contenido de valor en horas adecuadas es genial pero no hay que olvidar a los usuarios. Hay que hacerles saber que estamos ahí. Dando like a sus publicaciones, respondiendo a sus comentarios, haciéndolos partícipes de las decisiones de la empresa.
Es vital conocer cómo funciona lo que se ha publicado y analizar que debemos cambiar o mejorar para la siguiente publicación. Casi todas las redes sociales cuentan con una herramienta estadística muy intuitiva con lo que se podrá visualizar de manera más sencilla y rápida.
Fuente: Neo Attack